Lenguaje Espiritual. Mi interlocutor.

Nos visitó esta semana. Se llama Paul Dye. Es piloto misionero con New Tribes Missions (misión nuevas tribus).  Sus padres viajaron a Bolivia como misioneros con NTM. Paul tenía tan solo un año de edad en aquel momento. En en su primer año en Bolivia; su padre, su tío y otras personas más murieron siendo atacados por una de las tribus a las que fueron a servir. Uno podría pensar que es muy alto el precio que hay que pagar por servir y seguir a nuestro Señor pero, sin embargo y con el paso de los años, Paul decidió continuar sirviendo a aquel mismo Dios al que servían sus padres. Quizás podría haber huido y escapado de los planes que Dios estaba trazando pero, Paul decidió formar parte de la historia del establecimiento del reino de Dios en la tierra. Y Dios ha hecho maravillas milagrosas en la vida de Paul y lo sigue haciendo. Su dura experiencia de haber estado 4 días secuestrado por las FARC fue la herramienta para que muchas personas y por muchos años vean los milagros de Dios y den honra solo a El. He conocido a Paul y el me ha mostrado solo una cosa... Dios es un Dios que trabaja, hace milagros y quiere hacerlos en mi vida. Pero, como leíamos hoy en nuestro estudio bíblico; para que Jesús pudiera resucitar a Lázaro, fue necesario que primero muriera. ¿Estás dispuesto a morir para que Dios manifieste un milagro y se lleve gloria, honra y reconocimiento?  O prefieres ver el milagro en la vida de otro?