Nuestra economía está enferma. En nuestras oraciones podemos orar de diferentes formas. Si nos enfocamos en nuestra necesidad y en nuestros intereses, pues nuestra oración sería en dirección a que Dios sane nuestra economía. Otra forma de orar, sería enfocándonos en los intereses de nuestro Dios y que manifieste su gloria y reciba honra, manifestando un milagro. Pero, pedirle a Dios un milagro conlleva riesgos. Leía en La Biblia sobre la resurrección de Lázaro. El estaba enfermo y para que Dios manifestara su milagro era necesario que Lázaro estuviera muerto. Finalmente murió. Hoy estamos ante el desafío de mirar por los intereses nuestros o los de nuestro Señor y, hemos aceptado como conveniente sufrir la muerte de nuestra economía ,si este es el camino de Dios para nosotros. Estamos preparados. Pero, Dios nunca llega tarde y Lázaro resucitó.
1 comentario:
Marce... ¿cómo están las cosas..? qué implica esto de la muerte de "vuestra economia..."? quiero orar y clamar en la dirección precisa, y seguramente que el Señor contestará todas las oraciones, y se manifestará su gloria, aunque todos debamos pasar por momentos de incertidumbre. Pero El se manifiesta justamente en la adversidad y en la necesidad,,, sino ¿cómo habriamos de reconocer sus milagros, por su intervención prodigiosa..? ¡NOS GOZAREMOS Y NOS ALEGRAREMOS EN ÉL.... ! Y NUESTRA FE SALDRÁ FORTIFICADA...!!!!! un abrazo fuerte a los cuatro..
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