Personas amadas por Dios. Siervos que aman a Cristo. Obreros que conocen la mies. Hijos de Dios que trabajan. Eso es lo que encontramos este fin de semana en el retiro de la ICE. También los ha habido soñadores y; por supuesto, algunos "locos" y otros "re-locos". Pero todos determinados a invertir sus vidas en la obra de Cristo. A todo el equipo de la ICE (worldteam españa) queremos agradecerles el tiempo compartido. Sigamos trabajando con firmeza por alcanzar los sueños que Dios ha puestos en nuestros corazones. Vivan con expectativa. No pueden decirnos ilusos porque tengamos una ilusión.
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